POSITIVO Y NEGATIVO. Dos Formas de Encarar la Vida
por Emilio Santamaría S.
Cuentan de un anciano que en Marruecos sembraba con mucho ánimo unas datileras. Unos jóvenes que lo observaban le preguntaron si acaso no sabía que tardarían 20 años en comenzar a dar frutos. “Parece un hombre de avanzada edad, es posible que no vivas para ver los primeros dátiles de estas palmeras”. El hombre, evidentemente sabio, expresó su forma de pensar: “Puesto que yo comí muchos dátiles que otros, a quienes nunca conocí, sembraron en el pasado, me parece justo sembrar ahora para que otros, que yo ni siquiera conoceré, los coman en el futuro”.
Esta idea, me hizo recordar al distinguido Psiquiatra, ya fallecido, Dagoberto Espinoza Murra, un participante sumamente destacado en el Curso Dale Carnegie. En una de sus intervenciones, después de un ejemplo específico que dejaba muy clara la idea, nos mencionó “que nuestra incapacidad de vernos como una parte de la humanidad, los que están y los que vendrán, es que se crean dificultades de todo tipo, como frustraciones, resentimientos y odios”. Y concluyó, “Si nos diéramos cuenta que estamos de paso en este planeta y lo compartimos con los demás, quizá nos volveríamos más tolerantes y justos”.
Cuando usted no tire basura en la calle, pensando en que los demás tienen derecho a vivir en un lugar más limpio. Y cuando utilice el agua necesaria y no más que la necesaria, pensando que otros la necesitan. Cuando descubra que cosas así suceden en su vida, en ese momento usted sentirá que es parte de esa gran hermandad que representamos los seres humanos que vivimos en este tercer planeta del sistema solar. Podrá entonces levantar los ojos en una noche estrellada y sentir en toda su intensidad el amor de Dios. Porque para sintonizar así, usted necesita estar consciente de que forma parte de la humanidad, los que lo rodean y los que vendrán.
Por supuesto mucha gente se resiste a verse comprometida así, viven como si la humanidad finalizara con ellos. Argumentan mil razones como las diferencias culturales, económicas, raciales y hasta religiosas.
LO NEGATIVO:
Pensar que somos únicos y que todo debe girar a nuestro alrededor.
LO POSITIVO:
Comprender nuestra responsabilidad con los que están y con los que vendrán.
Visítenos en las redes sociales: Instagram / Facebook
Gracias por Compartirlo con personas que usted aprecia: